>La intervención de rehabilitación abarca tres construcciones adyacentes, dentro del núcleo rural del lugar de Castromao, ubicado en la provincia de Ourense.
El objetivo es el de convertir las antiguas casas de labranza, actualmente sin uso y en un estado de deterioro avanzado, en una vivienda a través de la anexión de los tres volúmenes originariamente separados. La planta de la parcela conjunta alcanza una superficie de 150 m2 dividida en planta baja y planta primera.
La pieza central está adosada a la situada al oeste, sin embargo, la conexión con la tercera, en la parte este, se lleva a cabo a través de una pasarela de madera sobre un pequeño pasadizo que permite el paso norte – sur entre el patio delantero y la finca trasera en la cara norte.
ASPECTOS FUNCIONALES
La ordenación funcional de la vivienda presenta una una clara distinción, aglutinando los usos “privados” por una parte (en la planta superior) y los “públicos” o comunes por otra (planta baja).
De tal forma que en la planta primera se distribuyen los dormitorios y baño en la parte este y central, y la cocina-comedor en la pieza oeste, siendo esta a su vez, el nexo de unión entre los dos conceptos principales de “público-privado”. Concretamente el volumen este, aprovechando su cierta independencia se plantea como un espacio en doble altura bañado por la luz cenital del amplio lucernario superior.
En este espacio diáfano de cocina y comedor es donde se sitúa la conexión entre planta baja y primera, a través de una escalera que conecta dicho espacio con una sala polivalente en la planta inferior, que puede actuar de salón o sala de estar.
El programa funcional se completa con dos espacios más, que serían las plantas bajas de los volúmenes este y central, con usos de lavadero tendedero, despensa y almacén.
ASPECTOS FORMALES Y DE DISEÑO
El primer paso para la rehabilitación de esta vivienda es detectar los elementos singulares y de interés y separarlos de los que gocen de menos entidad o se encuentren en un estado altamente amortizado, para proceder a su puesta a punto y cuidado independientemente de añadidos posteriores que pueden haber desvirtuado la construcción inicial.
Partiendo de esta premisa, cabe resaltar el valor del que, bajo nuestro punto de vista, tienen los muros de piedra, presentes en mayor o menor medida en los tres volúmenes en los que se desarrolla la vivienda. Esto los convertirá en el eje del proyecto, ya que se parte del respeto hacia los mismos para articular todas las estancias. Se llevará a cabo la limpieza y rejuntado, tanto interior como exterior, y no se abrirán nuevos huecos en fachadas, respetando la morfología original.
Para dotar de mayor homogeneidad a la cubierta, se cubre conjuntamente el volumen oeste y el central, siendo continuo el faldón norte y con pliegues el sur para adaptarse a la diferencia entre las plantas. Por el contrario la cubierta del volumen Este, también a dos aguas, como en la actualidad, ya que se encuentra girado y separado con respecto a los otros dos.
Se rehabilitan a su vez, los accesos a las diferentes zonas de la vivienda debido a su mal estado, aunque manteniendo la morfología actual.
Al volumen central, donde solo la parte baja es de piedra, se le añade un tabique de termoarcilla con cámara de aire y aislamiento al existente para mejorar la climatización y resistencia del actual, muy deteriorado. Todo ello se forrará exteriormente con un entramado de madera ventilada que tendrá continuidad con el enlistonado de la pasarela de conexión.
Las fachadas principales se distinguen perfectamente dependiendo de su orientación, caracterizándose por ser más opaca, uniforme y con huecos más pequeños la norte y más abierta la sur, con sus galerías y aperturas, para aprovechar lo mejor posible las condiciones climáticas.
REUTILIZACIÓN
Hacemos referencia a la recuperación y reutilización como fregaderos de los aseos de dos antiguas pías de piedra encontradas durante los trabajos de demolición y limpieza. También se aprovechan las piedras sobrantes para los bancales escalonados de las jardineras del patio.
MATERIALES
La intención es la de respetar los materiales tradicionales presentes en esta edificación y en el entorno, así como sus cualidades beneficiosas, como es el caso de la inercia térmica y la piedra. El cambio más relevante es la elección de la pizarra tradicional de la zona en lugar de la teja, que ya de por sí no era la original. Ante la imposibilidad de reutilización de las vigas de madera existentes como sujeción del futuro forjado y cubierta, se reutilizan para reponer los dobles dinteles usados en la parte superior de puertas y ventanas. Utilizando para la estructura principal entramado metálico y forjados de chapa colaborante, lo que disminuyó el presupuesto y permitió reducir las escuadrías del primer cálculo realizado en madera. Sin embargo, la madera sigue siendo una de las protagonistas del proyecto. Está presente en los muebles a medida realizados para la cocina-comedor. Pero sobre todo, en los listones de castaño que configuran el entramado ventilado usado como piel de la fachada, y como celosía en la parte del pasadizo. Sobre esta madera, colocada a exterior, se experimentó un producto desarrollado por la empresa luguesa “Maderas Besteiro” y la colaboración del CIS madera con el fin de mejorar sus prestaciones a la intemperie.
TONALIDAD
Dentro de las uniformes tonalidades que aportan los propios materiales, como la piedra, la madera o el acero, aparece el azul claro de las carpinterías exteriores. Esta elección se toma tras la investigación llevada a cabo entre las edificaciones antiguas de alrededor y la propia pintura original de la vivienda. Escondida tras una capa posterior de verde. También se usa este tono en la malla microperforada en voladizo de la fachada sur, como reminiscencia de una ampliación realizada años atrás.